domingo, 14 de noviembre de 2021

FUNDAMENTOS DEL TAROT Lección 22

EL ERMITAÑO

Cubo y letra yod

La línea Norte Inferior del Cubo del Espacio es asignada a Letra Hebrea Yod "Yod" que es la "Mano Abierta" y la clave 9, El Ermitaño. Esta línea es el borde del cubo en donde se juntan la cara de Abajo y la cara Norte, es decir, la agencia entre las claves 2 y 16 a nivel subconsciente. Puede repasar la lección anterior, Fundamentos del Tarot 21, en donde explicamos el arreglo de cartas 2, 9 y 16 (el vínculo lleva a esa parte). En el cubo del espacio también encontramos esta conexión.

Un propósito sabio para su vida puede enunciarse así:

Ser el vehículo transparente para el Yo Uno, despertar mi consciencia de unidad y amor; que cuando llegue el momento de abandonar este cuerpo físico, sepa reconocerme en la Luz de su presencia.

Reconocer que somos uno con lo que el budismo representa como Bhagavan Vairochana, Padre y Madre de Luz brillante, es comprender el significado del "Yo Soy", la expresión más elevada posible de la Voluntad Una en nuestros vehículos personales. Si se está lo suficientemente despierto al momento de trascender esta existencia material, sin importar lo que hayamos hecho anteriormente, este reconocimiento, la invocación y la entrega sincera bastarán para salvarnos de caer nuevamente en reinos de sufrimiento, de acuerdo a la sabiduría del Bardo Todol.

Hemos encarnado por diversas razones, una de ellas es que el desarrollo espiriitual necesita de la experiencia corporal para catalizarse, pues la consciencia se apoya también en instrumentos orgánicos para hacerse tangible. Es como un programa de cómputo o software, diseñado para correr en un ordenador con mas capacidad.

La vara del Ermitaño es la Fuerza o Poder de la Serpiente en formas orgánicas. La lámpara está hecha de vidrio y metal, representa la vida inorgánica, los procesos físicos y químicos. La estrella de seis puntas iluminando desde adentro, aparte de lo que ya hemos explicado en lecciones anteriores, representa al 6to signo, Virgo, y a la exaltación de su planeta regente, Mercurio (mente objetiva, consciencia). Adicionalmente, "Kokab" Palabra hebrea Kokab o Estrella que significa "Estrella", es también la palabra que designa a Mercurio.

Esa estrella que es la fuente de iluminación en esta carta se refiere a que, observando dentro de los fenómenos del mundo físico-químico (está dentro de la lámpara), podemos alcanzar el entendimiento y el dominio de las leyes que operan en el plano material, que es lo que hace la ciencia.

El propósito evolutivo del alma puede parecer algo abstracto, como si nada tuviera que ver con la materia, pero es todo lo contrario. Estamos destinados a trascender las limitaciones que impone Mara, por ello hay que enfrentarnos a la ilusión de estar encerrados en la forma y superar la creencia de que somos nada mas que eso. Este juego en el que olvidamos que somos Espíritu tiene un propósito, el de obligarnos a hacer un esfuerzo consciente por recordar quienes somos, por descubrir la verdad y afianzarla para siempre.

Hacer del conocimiento volátil algo fijo es llegar a una comprensión que jamás perdemos, ni si quiera cuando pasamos a una nueva forma de existencia. Tarde o temprano comenzamos a recordar, hasta donde hayamos alcanzado en nuestro entendimiento de la ley cósmica, para continuar nuestra evolución.

El iniciado busca mantener su cuerpo físico por tiempo indefinido, sin necesidad de volver a empezar en un nuevo cuerpo de bebé y esperar a recordar todo nuevamente. Hay quienes prefieren ocupar un cuerpo distinto o robarlo, para continuar con su misión específica, lo cual sucede en casos como cuando alguien se muere y aparentemente revive, pero en realidad ya es otra la mente dentro de ese jóven cuerpo.

Lidiar con la percepción parcial de la realidad, es una forma de entrenar nuestros poderes superiores y despertar la agudeza mental, necesaria para dominar el arte de la transmutación. La ciencia moderna tiene algo en común con la antigua alquimia, ambas buscan comprender y transformar realidades, dominar el reino por medio del conocimiento práctico y superar las limitaciones.

La línea Norte Inferior del cubo también conecta a las líneas Oriente Inferior (Chet Letra Chet = Campo , clave 7, La Carroza) y Occidente Inferior (Ayin Letra hebrea Ayin , clave 15, El Diablo) a nivel subconsciente (cara de abajo en el cubo).

A propósito de su posición en el cubo, observe que, a la izquierda de la clave 7, precisamente en el lado norte de la escena, están los símbolos de la Severidad (el norte es Marte, Geburah, columna izquierda del árbol etc) que son la luna enojada en el hombro y la esfinge de gesto serio.

Aunque la fuerza de vida nos presente adversidades, el contacto con el verdadero Yo nos permite entender que su presencia está en todo, principalmente en nuestra personalidad, que entendemos como un vehículo responsivo a su Voluntad (claves 7 y 9). Esto nos da la inteligencia y sabiduría para descubrir, detrás de las apariencias aterradoras, el sistema de creencias que hay que corregir, para disolver cualquier problema o limitación (clave 15).

Si ha seguido estas lecciones, podrá meditar sobre esta relación de cartas. La Inteligencia de la Casa de la Influencia (clave 7, Cáncer, receptividad, lenguaje, nutrición, protección etc) es el principio que actúa a través de la Inteligencia de Voluntad (clave 9, Respuesta, Virgo, asimilación en el intestino delgado, construcción del nuevo cuerpo etc) para aterrizarnos en la Inteligencia Renovadora (clave 15, Capricornio, risa o alegría, el descubrimiento del error y la consecuente liberación del sufrimiento innecesario).

Por otra parte la línea Norte Inferior también conecta a las líneas Noreste (Heh Letra hebrea Heh, clave 4, El Emperador, Aries, vista, razón) y Noroeste (Lamed Letra hebrea Lamed, clave 11, La Justicia, Libra, karma, suprarrenales, equilibrio) a nivel subconsciente (cara de abajo en el cubo). Los procesos más importantes son los que ocurren fuera de la percepción y el control directo de la mente consciente. Este arreglo de cartas nos habla sobre uno de ellos.

La Inteligencia Constituyente (clave 4) a través de la Inteligencia de Voluntad (clave 9) activa la Inteligencia Fiel (clave 11). En otras palabras, participar de la visión del orden o razón universal, entendiendo la ley de Respuesta, modifica el karma para establecer armonía y equilibrio en todos los aspectos de la vida. El gris de las montañas y el manto del Ermitaño hace énfasis en la unión y el equilibrio de opuestos.

La actividad cerebral consciente, asociada con Aries (clave 4) es necesaria para estudiar y definir mentalmente el modelo de un organismo mas fino, mismo que la subconsciencia acepta y comienza a construir desde el intestino delgado, regido por Virgo (clave 9). Ahí se liberan en el torrente sanguíneo los nutrientes ya refinados para ser absorbidos por las células, entre ellos los aminoácidos que han de servir para la síntesis de moléculas de los ácidos nucleicos. Este proceso es el dogma central de la biología molecular. La clave del salto al ser humano de consciencia cósmica está en los cromozomas.

El increíble laboratorio bio-químico de nuestro cuerpo, a partir de este modelo/sugestión, eventualmente provoca los cambios necesarios en el ADN, gracias a los riñones y las glándulas suprarrenales, regidos por Libra (clave 11). Estos órganos son muy importantes en la obra sobrenatural, limpian y mantienen el equilibrio de los elementos en la sangre.

La información genética está altamente organizada, pero puede organizarse de cierta forma, siguiendo 'nuevos planos de construcción'. De eso se encarga la subconsciencia, pero nunca lo va a hacer a menos que se le de la instrucción y los materiales correctos, y por sobre todo, con una ayuda celestial.

Las condiciones de las células en el cuerpo de un adepto son muy diferentes del resto de la humanidad, comenzando con el número y estructura de los cromozomas. Sin embargo la obra, en vez de conducir a deformaciones y enfermedades —como sucede en los errores del desdoblamiento celular—, produce el estado del ser humano regenerado, el adeptado.

En eso consisten los grandes Misterios Eleusinos, en un renacimiento después de la 'muerte', solo que aparentemente sin dejar el cuerpo físico actual. El cuerpo corruptible del ser mortal (identificado con la personalidad antigua y engañado por el sentimiento de individualidad) realmente desaparece desde adentro.

Es curioso que en el síndrome Down hay un problema con el cromozoma 21, el mismo número hasta donde llegan los arcanos mayores del Tarot. Normalmente en la reproducción humana, después de la unión del espermatozoide y el óvulo, la célula nueva debe quedar con sus 46 cromozomas, arreglados en 23 pares (cada progenitor aporta la mitad, 23 el padre y 23 la madre).

Cuando aparece una trecera copia del 21 (quedando 47) sucede esta condición tan peculiar. Es bien sabido que muchas de las personas así nacidas, suelen tener un gran corazón, desconocen las diferencias entre los seres y saben, por naturaleza, que la absurda necesidad de competir y ser mas que los demás es una locura (la verdadera enfermedad es el egoismo).

La Gran Obra es un proceso de transformación profunda, psico-biológica, que implica alcanzar una copia extra de ese trecer cromozoma 21, para completar el par. Es decir, el adepto tiene dos cromozomas más que el hombre ordinario (en suma 48 en cada célula). Además de ello, suceden otros cambios estructurales en su interior, en el ADN mitocondrial y en los telómeros de los cromozomas.

Se replica y potencializa, en todo el cuerpo, la capacidad única de regeneración que tienen los glóbulos y las células hepáticas. Todo ello es comparable con la capaciad de renovarse que tienen las serpientes, alcanzando virtualmente la inmortalidad. Las células de todos sus órganos y de la sangre pueden duplicarse infinidad de veces, generando un cuerpo nuevo. Esto hace que la llamada muerte natural, por lo menos, pueda ser aplazada tanto como lo deseen.

Ciertos centros nerviosos, en donde se enrosca la energía Kundalini, son reconstruidos para permitirle su ascenso controlado. Las glándulas trabajan de manera distinta y mejorada, se reactiva el Timo, se despiertan los chakras, el de la corona conecta con los estados de existencia mas sutiles.

En el ser humano despierto, la percepción es infinitamente mas completa al ir mas allá de lo tridimensional; se activan nuevas redes neuronales, tanto del cerebro epigástrico como de la cabeza, despertando con ello capacidades que parecen milagros a los ojos del no iniciado.

Logar esos cambios en su cuerpo, le da al adepto el mismo avance de los hermanos con Down, que conectan fácilmente con el amor universal. Sin embargo esta transformación (que a diferencia de cualquier accidente genético se trabaja a propósito) confiere al operario el pleno uso de sus facultades mentales superiores, propias del ser humano regenerado, con la apariencia de una persona sana. Sea dicho con todo respeto a quienes tengan características diferentes de lo común.

En ocultismo se advierte de la necesidad de pasar por una purificación o purga del Mercurio, como primer paso de la Gran Obra. Existe la posibilidad de lograr todo lo contrario a su propósito, es decir, de 'bestializarse' en vez de 'divinizarse'. Todo cambio a nivel genético siempre es delicado.

Adentrarse en el laboratorio sin haberse iniciado en el oratorio, lleva a grandes errores, fielmente represenatados por la licantropía. En vez de evolucionar puede desencadenar un retroceso evolutivo, causado por las impurezas que aún puedan existir en su alma. Por ello, antes de pensar en las ventajas que ha de traerle el magisterio, debe comenzar por perfeccionar al 100% su volición.

Si ya su alma cuenta con el Azufre o deseo de elevarse, olvídese de querer poderes y riquezas, eso llega como producto secundario y es lo de menos. ¿A caso le podrá importar lo temporal cuando conteple al Absoluto cara a cara?

Los maestros insisten en recordarle que, mientras su ideal pertenezca al mundo sub-lunar, aunque pretenda revestirlo de santidad, jamás podrá completar la obra. Se quedará a lo mucho en alguna condición entre animal y semi-dios, pero corrupta, esclava de las necesidades, en donde nunca obtendrá la paz y mucho menos la Piedra en toda su fijeza o perfección.

La hipocresía y la ambición del ego han perdido en la noche psíquica a muchos, que en apariencia iban por la iluminación, pero fallaron en ver la Luz guía de aquella lámpara que sostiene el Ermitaño; fallaron en usar su discriminación para distinguir lo real de lo irreal, lo que valía la pena de lo que era nada.

La noche de la clave 9 hace contraste con el día de la clave 8, como sucede en cada par de cartas consecutivas. La helada cima de la montaña por un lado y el cálido y fértil valle por otro. En la clave 9 el agua, que fluye a lo largo de la serie de arcanos mayores y se origina en el manto de la gran Sacerdotiza, se encuentra congelada.

La substancia mental raíz está fija en las alturas de la supraconsciencia, en estado de latencia, diferente al estado vibratorio, fluido y cambiante de la manifestación. La clave 9 representa al Yo eterno e inmutable, la Voluntad Una, causa de todas las formas y los 'yoes' cambiantes. La noche de la clave 9 es lo inmanifestado, el vacío, el campo cuántico unificado en donde todas las posibilidades existen en potencia.

Cubo 6, 8, 14

El principio de contraste entre claves consecutivas se ve reflejado igualmente en el cubo del espacio. Mientras la línea de la clave 9 es Norte Inferior, observe a su contraparte en la cara de arriba del cubo. La línea Norte superior (Teth Letra hebrea Teth, clave 8, La Fuerza, Leo, columna vertebral, ley de Sugestión etc.) conecta en el ámbito de la autoconsciencia (arriba, el Mago) a las líneas Oriente superor (Zaín Letra hebrea Zain clave 6, los Amantes, Géminis, olfato, discriminación etc) y Occidente superor (Samek Letra hebrea Samek , clave 14, piernas, soporte, Sagitario, comprobación etc.)

La interpretación de estas cartas será un excelente ejercicio para usted. En principio, la correcta discriminación, el equilibrio y la armonía entre las modalildades de la mente representadas en la clave 6, es requisito para hacer uso consciente de la ley de sugestión, de manera que el resultado sea la conversación con el santo angel guardián y el dominio del arte. El ángel de la clave 14 modera a Leo y a Escorpio. Hay un tesoro que puede extraer de esta meditación, por favor anote sus descubrimientos en su diario esotérico.

Para esta lección la tarea consiste en practicar lo siguiente:

  1. Convendrá que estudie las funciones de los riñones y las glándulas suprarrenales, así como las bases de genética. Conozca de nutrición y aminoácidos esenciales. Todo ese conocimiento y el jercicio de su razonamiento, es el principio para llegar a estructurar un nuevo modelo de cuerpo.

  2. Trate de poner atención en las sensaciones táctiles, recordando que todo lo aparentemente sólido es una extensión de la Luz, una forma de vibración de la substancia fluida, astral, que forma partículas y estructuras geométricas sutiles, como cristales, en lo que llamamos mundo material. Esa substancia primaria es mental por naturaleza, usted vive dentro de ideas cristalizadas, literalmente. Todo es maleable si sabe pensar e imaginar correctamente, el reino está a sus pies, como lo muestra el Ermitaño.

  3. Aprecie sus manos, vea la maravilla de instrumentos que son y agradézcales, trátelas bien. Perciba, en cada trabajo que realice, como el verdadero hacedor es la energía radiante del Yo Uno, dirigiéndo cada movimiento desde su cerebro hasta sus finos instrumentos, por medio de corrientes eléctircas que viajan por su sistema nervioso motor. Dedique todo lo que haga a la expresión constructiva y positiva de la Voluntad Una.

  4. Imagine la forma material asociada a su propósito, por mas espiritual que sea, de manera que sea susceptible de ser tocada, siéntala como algo real para que se precipite en el mundo de la manifestación. Puede imaginar como el Espíritu, que es usted en realidad, vive y se manifiesta en un cuerpo puro y sano, capaz de canalizar los estados de consciencia del Homo Espiritualis.

  5. Medite y haga contacto vía subconsciente con la Identidad Una. Perciba la presencia real del Eterno, animando su vehículo temporal, cada ser viviente, el universo entero. Todo lo que usted cree ser descansa en Él, que es lo único seguro y triunfante que existe. Trate de darse cuenta de quien es el 'Yo Soy' y participe del equilibrio y la armonía con el todo. Pase lo que pase, aunque cambie de forma, usted se encontrará en un estado perfecto, su verdadero Yo es indestructible.

  6. Descubra la relación entre la clave 9 y todas las precedentes. Cada una es un aspecto de la Identidad Una. El 9 es llamado 'Fundamento', como puede verlo en el noveno sephirah del Árbol de la Vida, Yesod. El caracter Yod es la forma fundamental de todas las letras hebreas, símbolo de la Identidad una en todas sus modalidades. Puede tomar como punto de partida la lección anterior, en donde mencionamos que el Loco es el mismo Anciano Santo en su aspecto juvenil (siga el vínculo). Tome nota en su diario oculto del fruto de sus meditaciones: La clave 9 corona la primera serie de cartas de un solo dígito, indicando que se completó un ciclo, se alcanzó el adeptado.
detalle del ermitaño

Para cerrar esta lección, observe por favor la forma del gorro del Ermitaño, su color azul se refiere a la Sacerdotiza, a la memoria subconsciente. El Yo Real guarda perfecta memoria de quien es y de sus poderes. Todo puede ser recordado y activado al identificarse con la Identidad Una. Se dice que "Yod es la corona". Yod es la lertra inicial de Heová o Iaveh "Heová", un nombre de Dios que significa "todo lo que es, fué y será", cuya suma es 26, al igual que el número de coordenadas del cubo del espacio: 12 líneas externas + 7 líneas internas + 6 caras + 1 centro = 26.

La causa de causas es Voluntad Primaria, que trae a manifestación todo cuanto existe en el orden universal y en el espacio (cubo), llenándolo con extensiones de si misma, con Luz. En su estado puro es invisible, se irradia a si misma por todo el cosmos y se hace perceptible por el choque con finas partículas, que ella misma crea. Todo está hecho del Yo Soy, la presencia ignea que anima al universo.

Recuerde que, así como la mano se mueve en respuesta al impulso originado en el cerebro, la base de su actividad personal se origina en la Presencia que impulsa todo absolutamente. Yod es la corona, es decir la Voluntad. Su verdadero Yo es uno y el mismo con ese Poder que crea y sostiene al universo. L.U.X.