La sola aspiración tampoco conduce a resultados, debe haber actividad. Ya sea el deseo central un bien material, o el éxito de una empresa, o la liberaciòn del sufrimiento o lo que sea, todo es un buen pretexto para ejercitarnos y crecer espiritualmente. Vigile su motivaciòn, preste atenciòn solo a lo que es digno de su ser más elevado, solo a lo que ha de ser para bien de todos los involucrados, recuerde que el beneficio o el daño se regresan.
La Obra Magna, la Gran Obra de la que hablaban los antiguos alquimistas, implica saber dirigir la Fuerza Astral. Es un arte-ciencia que exige la pureza del operario, pues tal conocimiento es poder, y debe ser aplicado con sabiduría.
Por ello la insistencia de todas las doctrinas espirituales serias en que las primeras etapas del camino son de limpieza interna. Si aún quedara rastro de egoismo, si la mente del practicante fuera imperfecta, caería fácilmente en errores que provocarían el caos para si mismo y los demás. Ejemplos de esto han habido en la historia de la humanidad.
Los preliminares del adeptado son las labores de Hércules en la mitología griega, son lo más difícil, vencernos a nosotros mismos, a la arrogancia, a la creencia en el ego; eliminar de raíz las mentes que causan la infelicidad.
La sustancia primaria que penetra y fluye en toda cosa en el universo es conocida actualmente como electricidad y tiene cuatro propiedades:
- Disuelve
- Consolida
- Excita
- Calma
Las ideas de Eliphas Levi en su tiempo fueron ridiculizadas, pero la ciencia ha encontrado evidencia de que son verdad. Durante años el Dr. George Grile, por mencionar un ejemplo, ha estudiado el cuerpo humano como una máquina eléctrica. Ahora existen aparatos que captan las finas radiaciones de nuestros cuerpos y las pueden medir.
La ciencia lentamente llega a confirmar lo que los sabios conocían desde tiempos muy antiguos. Es asombrosa la coincidencia en las enseñanzas provenientes de la sabiduría de Oriente, de las culturas indígenas de América, de las escuelas Occidentales, de las grandes religiones en su esencia liberadora.